La oferta inmobiliaria en Querétaro se inclina de manera determinante hacia la vivienda horizontal con una relación de 85.5% sobre 14.5% de la vertical, de acuerdo con el Reporte del Mercado Inmobiliario Residencial de Querétaro de la plataforma inmobiliaria Lamudi.
En un comunicado, el sitio web detalló que el estudio realizado en la entidad señala que las mujeres fueron quienes más solicitudes registraron en portales inmobiliarios con 59%, comparado con 40% del género masculino.
Mientras que la generación millennial y X, de 25 a 44 años, fueron los que más participaron en medios digitales con una suma acumulada de 63 por ciento. Las tendencias más claras son la capital, Santiago de Querétaro, y San Juan del Río.
El precio de una propiedad
En cuanto al precio por metro cuadrado, los números rondan por los 13,900 pesos por una casa y 11,756 por departamentos, con un crecimiento de 0.3 y 2.0% respectivamente, esto al cierre del segundo trimestre de 2018.
El portal inmobiliario expuso que la necesidad de tener un impacto ambiental responsable y un control de la densidad óptimo lleva al sector a pujar por construcciones elevadas cerca de la zona industrial.
De acuerdo con la demanda, las personas que están interesadas en adquirir casas o departamentos tienen en la mira propiedades del segmento de interés social o económico, con precios debajo a los 2 millones de pesos, 40 y 42% respectivamente.
Jaume Molet, CEO y cofundador de Lamudi México, comentó que al impulsar el sector industrial en el estado, la tendencia tanto de la demanda y de la oferta se mantendrá a la alza, pero se debe estar atento a los esfuerzos que se hacen por mejorar el precio de las propiedades, así como atender los instrumentos que facilitan el acceso a la vivienda de la región.
Arturo Hernández Serrano, presidente de la Asociación Queretana de Inmobiliarias (AQUÍ) explicó que hay dos grandes retos para el estado.
Uno es que Querétaro no tiene agua para abastecer la demanda de los próximos años y el segundo es que la planeación urbana actual ya es un reto, porque no es suficiente debido a que el problema crece más rápido que la solución, explicó Hernández Serrano.